“Llegamos acá otro 24 de Marzo más. Eso es porque este pueblo se compromete cada vez más con la democracia. Somos la historia imparable de este pueblo que no dará ni un solo paso atrás, que no permitirá ningún atropello, que seguirá su camino con las banderas bien en alto para llevarlas a la victoria. Acá estamos para seguir construyendo todos juntos una Latinoamérica con más memoria, verdad y justicia”, concluyeron los organismos de Derechos Humanos reunidos una vez más en Plaza de Mayo para hacer memoria del inicio de la última dictadura cívico militar hace ya 36 años y para volver a gritar bien fuerte que ¡Nunca Más! permitiremos una embestida criminal como aquella que duró larguísimos siete años.
Desde el escenario, Marta Vázquez, Taty Almeida y Haydeé García de Gastelú, de Madres Línea Fundadora; Hebe de Bonafini, de Madres de Plaza de Mayo; Estela de Carlotto, de Abuelas; Lita Boitano, de Familiares, y Carlos Pisoni y Agustín Cetrángolo, de HIJOS, lanzaron la proclama que cientos de miles de personas acompañaron desde abajo. La Cámpora, Kolina, el Movimiento Evita, la Martín Fierro, la Corriente Nacional de la Militancia, la JP Descamisados, Miles, La Scalabrini, el Partido Comunista Congreso Extraordinario, Nuevo Encuentro, la CTA, la Juventud Sindical y la Federación de Estudiantes Secundarios, fueron algunas de las muchas agrupaciones que poblaron la Plaza y sus alrededores.
“Llora, llora, llora la derecha porque los pibes estamos de fiesta. Le vamos a demostrar
que Néstor no se fue. Volveremos a ganar. Gorila no volvés maaaaaasssss…..”. Desde temprano, poco después del almuerzo, los compañeros de La Cámpora fueron encontrándose en Alsina y 9 de Julio. Muchos se habían agrupado desde antes en sus unidades básicas y desde allí partido hacia el encuentro en el centro de la ciudad. Banderas de las diferentes comunas porteñas, de localidades de la provincia de Buenos Aires, de Diversia, de Integra, iban encolumnándose y armando una larga caravana que se extendía cada vez a medida que pasaban las horas.
“Los grupos económicos también fueron la dictadura”, decía la bandera que encabezó la marcha convocada por Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, Hermanos de Desaparecidos por la Verdad y la Justicia e Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio. Y desde el escenario se denunciaba que las empresas Ford, Mercedes-Benz, Acindar, Clarín, La Nación, Loma Negra, Techint, La Veloz del Norte, Astarsa, Papel Prensa y el Banco de Italia fueron cómplices y beneficiarias del terrorismo de Estado.
“No se olviden nunca más de lo que pasó. Estos actos se tienen que repetir porque la historia se construye a partir de recordar el pasado”, decía Eduardo, 53 años, compañero de la Comuna 10 de Capital.
“Acá está, ya llegó, esta es la Gloriosa Jotapé. La que siempre va a bancar al proyecto nacional. Con Cristina otra vez volveremos a ganar… ganaaaaaarrrrrr”, coreaba la columna unida en un solo grito a medida que se adentraba por la Avenida rumbo a la Plaza.
“Somos la voz de los que no están para que eso no pase Nunca Más. La juventud y la gente en la calle es algo increíble, emocionante”, aseguraba la compañera Silvana, 37 años, de Morón.
“Vamos, vamos Cristina. Vamos, vamos Cristina”, las manos en alto agitándose, mientras los bombos, redoblantes y trompetas comenzaban a ponerle música a tanto canto, y ayudaban a las gargantas a no claudicar en el grito.
“Es conmovedor ver a tanta juventud unida, recordando 36 años del golpe más trágico y sangriento. La juventud tomó como bandera la memoria, la justicia y la verdad; y a partir de este momento hay un punto de inflexión en la historia que está marcando que no se van a volver a repetir esos errores. Es fundamental la lucha que se lleva adelante para avanzar en el desarrollo de los derechos humanos. Estoy sumamente emocionado por el momento que estamos viviendo”, destacaba el compañero Martín, 26 años, de Mar del Plata.
La columna avanzaba a toda orquesta, y las murgueras comenzaban a desplegar sus pasos de carnaval por la Avenida mientras la militancia a pleno saltaba y cantaba: “Qué te pasa gorila todavía seguís esperando. Qué te pasa gorila, en Clarín están todos llorando. Van pasando los años, escuchamos a tus dirigentes: que el Gobierno se cae; y al Gobierno lo banca la gente. Con Cristina los pibes están cubiertos. Con Cristina tenemos la ley de medios, oh oh oh. Con Cristina hay un gobierno diferente. Y este Proyecto …a vos te duele. Acá está el Pueblo y Kirchner vuelveeeeeeee…”
“Es un honor que tuvieron nuestros viejos que para que podamos estar hoy nosotros acá, ellos lucharon por la democracia. Vivo esta jornada con dolor por los compañeros de mis viejos que no están, pero con alegría porque podemos estar acá gracias a Néstor y a Cristina”, señalaba la compañera Julieta, 27 años, de Santa Cruz, que estudia en Buenos Aires.
La bandera de “Memoria, Verdad y Justicia. Soberanía y Democracia” se desplegaba a lo ancho de la Avenida. Detrás ella, miles de militantes acompañaban agitando “Abran paso, llegó la Jotapé; del Pingüino, de Chávez, de Fidel. Te llevamos Eva en el corazón. Acá estamos los soldados de Peroooooooonnnnnnn….”
“La verdad que es una enorme alegría ver esta manifestación que tomó un carácter distinto. Hasta 2003 veníamos a mostrar nuestras frustraciones por las injusticias y la impunidad que se vivía. Pero hoy venimos a festejar que hemos vencido, que hemos ganado y alcanzamos un montón de reivindicaciones, en las condenas a los asesinos que ayer estaban libres por la calle”, subrayaba el compañero Federico, 27 años, de la Comuna 5 de CABA.
Las banderas marcaban la pertenencia de los militantes. Pero sus remeras también llevaban un mensaje. “Bajando un cuadro, formaste miles”, rezaban algunas. Otras aseguraban “Yo lo vi” en la espalda, y en el frente se podía ver la foto de Néstor mirando como el ex jefe del Ejército Roberto Bendini bajaba, subido a un banquito, el cuadro del asesino dictador Jorge Rafael Videla. También estaban las remeras que advertían que quien la vestía era un “Joven incauto adoctrinado por La Cámpora”.
“Te llevamos en el corazón. Yo soy de Eva Duarte y Juan Perón. Yo soy así, peroncho soy, de la cabeza siempre voy. Ya van a ver, vamos a volver, es la Gloriosa JotaPe. Vayas donde vayas voy a ir. Vos sos la razón de mi existiiiiiirrrrr…”
“Estoy feliz de estar acá. Durante muchos años venía muy poca gente, pero los últimos años cada vez hay más. Hoy me siento mejor que nunca porque con este gobierno hay más libertad. Puedo pensar, compartir, hacer lo que se me ocurre, ir donde quiera”, remarcaba la compañera Elena, 60 años, de Palermo.
La columna ya ingresaba a la Plaza. Al frente, los compañeros de la Mesa de Conducción: Mayra Mendoza, Andrés “Cuervo” Larroque, Mariano Recalde, Wado De Pedro, José Ottavis, Juan Cabandié. También acompañaba el compañero jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina. Dos muñecos bien grandes, de Néstor y Cristina, asomaban entre la extensa masa de militantes.
“Hay que recordar a toda la gente que murió. Tiene que estar todo el pueblo acá, por la gente que murió. Esta juventud es el futuro del país y hay que apoyarla”, afirmaba el compañero Alberto, 60 años, de Lanús.
Y la compañera Alejandra, 33 años, de San Martín, se mostraba “conmovida por este acontecimiento. Es muy importante para nosotros lo que hizo Néstor. Siento que yo podría haber sido uno de ellos. Hay que vivir como una fiesta esta marcha, más allá de conmemorar y recordar a todos los que dieron la vida por nosotros, estoy feliz por estar viviendo esto y ser parte de esta historia”.
“Con los genocidas en el poder se implementó un plan económico, político, social y cultural contra el pueblo. Apoyando e instigando este golpe de Estado estuvieron los grandes grupos económicos.
Exigimos juicio y castigo porque fueron parte de los que financiaron y se beneficiaron. Se enriquecieron con la dictadura y fueron partícipes: sin ellos el genocidio no hubiera sido posible”, señalaban desde el escenario los integrantes de los organismos de derechos humanos.
Otro 24 de Marzo volvimos a reventar la Plaza. Con memoria, con reflexión, pero con una enorme alegría, porque no sólo los militares están presos, sino que además recuperamos el trabajo, la dignidad y los proyectos para todos los argentinos.
